En plena cobertura del cónclave que busca definir al sucesor del papa Francisco, se vivió un momento insólito en las inmediaciones del Vaticano. Una espesa columna de humo comenzó a salir de un edificio cercano a la Basílica de San Pedro, lo que provocó confusión entre los presentes y los millones de espectadores que seguían las alternativas en directo.

El hecho ocurrió mientras el periodista argentino Sergio Rubín reportaba en vivo para Todo Noticias desde la terraza de un edificio ubicado a escasos metros de la Plaza San Pedro. En un instante, el fondo de la transmisión fue invadido por una densa humareda que muchos asociaron, en un primer momento, con la esperada “fumata” del cónclave.

“Humo confuso”, tituló irónicamente la gráfica del canal, al tiempo que las redes sociales comenzaron a replicar capturas del extraño episodio, alimentando las especulaciones. Algunos medios internacionales incluso llegaron a insinuar una posible señal prematura del cónclave, aunque rápidamente se descartó esa posibilidad.

La chimenea oficial de la Capilla Sixtina, por donde se anuncia con humo negro o blanco el resultado de cada votación, se encontraba intacta y sin actividad en ese momento. Poco después, fuentes cercanas al operativo de seguridad del Vaticano confirmaron que el humo provenía de un incendio menor en un edificio cercano, que fue rápidamente controlado.

Por el momento no se reportaron heridos ni daños de gravedad, pero la imagen no tardó en viralizarse y sumar un ingrediente inesperado a la jornada cargada de simbolismo y expectativa.

“Fue un momento tenso, porque desde nuestra posición parecía salir directamente del Vaticano. Rápidamente supimos que no tenía nada que ver, pero durante unos segundos todo fue incertidumbre”, relató Rubín luego del incidente.

El episodio, aunque anecdótico, volvió a demostrar la tensión y el interés global que despierta el proceso de elección papal, donde cada detalle puede adquirir una dimensión simbólica.

Mientras tanto, el cónclave continúa su curso luego de que la fumata negra emitida este miércoles confirmara que los cardenales aún no han logrado elegir al nuevo pontífice. La próxima votación está prevista para este jueves por la mañana, y hasta que se emita humo blanco desde la Capilla Sixtina, el mundo seguirá mirando hacia los cielos del Vaticano… pero con un poco más de atención al humo “equivocado”.