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Salud
12/09/2025 | Hace 20 horas

Cómo recuperar la suavidad de tus toallas con un truco simple y casero

Cómo recuperar la suavidad de tus toallas con un truco simple y casero
Con este método fácil, las toallas duras y ásperas vuelven a quedar suaves como nuevas.

¿Te pasó alguna vez que, después de varios lavados, tus toallas quedaron ásperas y con una textura incómoda? Este problema es muy común, y la buena noticia es que no hace falta gastar en productos caros para solucionarlo. Existe un truco casero, barato y efectivo que dejará tus toallas suaves, esponjosas y con mejor aspecto: el vinagre blanco.

Con el tiempo, los residuos de jabón, el exceso de suavizante y la cal del agua se acumulan en las fibras de la tela. Como resultado, las toallas pierden suavidad y absorción, y se convierten en paños rígidos y poco agradables al tacto.

Lavado inicial: colocá las toallas en el lavarropas como lo hacés normalmente.
Sustitución del suavizante: en lugar de usar suavizante, agregá una taza de vinagre blanco en el compartimento correspondiente.
Ciclo de lavado: elegí un programa de agua caliente o tibia (según lo que indique la etiqueta de la toalla).
Secado correcto: al terminar, dejá que se sequen al aire libre o en secadora, sacudiéndolas antes para que recuperen esponjosidad.
Disuelve residuos de detergente y cal, que son los responsables de la rigidez.
Neutraliza olores, dejando las toallas frescas y limpias.
Recupera la absorción natural de la tela, evitando que el agua se resbale.
Si tus toallas están muy duras, repetí el lavado con vinagre una o dos veces.
Alterná el uso de vinagre con el de bicarbonato de sodio (en lavados separados) para potenciar el resultado.
Evitá usar demasiado suavizante: en lugar de suavizar, genera una capa que endurece la tela.

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