Un nuevo y lamentable ataque homofóbico conmueve a la provincia de Salta ya que Roberto “Tito” Costilla, bailarín y profesor de bachata de 27 años, regresaba de una reunión de amigos junto a su hermana cuando fue atacado por dos sujetos que le provocaron una fractura de tibia y peroné.
“Gente…hoy sufrí un brutal ataque por parte de una familia violenta que me agrede hace 17 años…. dejándome en el hospital con fractura de tibia y peroné”, publicó “Tito” en su cuenta de Instagram.
Además, identificó con nombre y apellido a sus agresores: “Ella es Zulma Urzagaste (profesora de inglés del colegio Benita Campos y otros) junto a su marido y su hijo Fabrizio Urzagaste”.
No era la primera vez que los integrantes de esa familia agredían físicamente a Tito, pero sí la más salvaje. El hostigamiento y los insultos homofóbicos hacia él forman parte de una actitud frecuente, por lo que el joven los viene denunciando en la justicia desde 2019.
“Me pegaron en la pierna para arruinarme la carrera”, aseguró la víctima al ser entrevistado en Crónica TV. “Tengo la pierna totalmente destrozada”, se lamentó el bailarín, quien está convencido de que se trató de una acción intencionada para que no pueda ejercer nunca más su profesión.
El fin de semana, Tito deberá ser intervenido quirúrgicamente y lo aguardan 6 meses de rehabilitación. Más allá de la bronca que siente en este momento, se mostró optimista hacia el futuro: “Estoy esperanzado en que me voy a volver a recuperar”.
En tanto, los vecinos acusados por la golpiza fueron demorados ayer por la tarde por los efectivos de la Policía de Salta. “Son padre e hijo”, confirmó Tito. En el hecho ya interviene la Fiscalía Penal 3, a cargo de Horacio Córdoba Mazuranic, pero la actuación se da después de varias denuncias cruzadas que se venían registrando desde hace años. Precisamente, fue el INADI el que cuestionó la inacción de la Justicia en el caso.
El hecho causó conmoción y un repudio generalizado en la población, que marchó ayer por la tarde en solidaridad por lo sucedido desde la casa del profesor de danza hasta la comisaría del barrio Docente Sur, de la capital salteña.
La familia Costilla está convencida de que se trató de un ataque homofóbico. “En estos últimos años se han ensañado con él y cada vez que lo insultaron todo va dirigido a su orientación sexual”, contó su padre a los medios de prensa salteños.