La Fiscalía ha apresado e indagaría esta semana a un individuo de la ciudad de Sumampa, departamento Quebrachos, sindicado de intentar abusar sexualmente de dos jóvenes: una de ellas logró escaparse arañándolo en la cara y así posibilitó que la policía lo identificara.
Según la investigación de la Seccional 33, el primer ataque fue perpetrado el lunes de la semana pasada por la noche.
La mujer se retiraba de su trabajo. A metros del local, alguien la interceptó y comenzó a manosearla. Resistiéndose, la víctima gritó, luchó y cayeron al piso forcejeando.
Desesperación
La valiente mujer logró arañarlo en el rostro, pero sin evitar ser manoseada y despojada de su remera, según informaron fuentes que investigan el horrendo caso.
Como pudo, se puso de pie y corrió de vuelta hacia su trabajo y el degenerado huyó, trascendió.
“Era petizo, gordito y con aliento a tabaco”, describió la damnificada al refrendar la denuncia efectuada ante los funcionarios policiales.
Menos de una semana después, otro incidente similar tuvo de involuntaria protagonista a una joven de la zona. También, la víctima fue manoseada y habría alcanzado a lanzarle una trompada en la cara al agresor, añadieron los voceros policiales.
Con dos jóvenes agredidas sexualmente, la Fiscalía cerró sus sospechas sobre un sujeto sin padres y con aparentes trastornos psicológicos, al extremo de que se sabe ofrecía dinero a cambio de sexo, que con total desenfado propone a cualquier joven del lugar.
“Abuso sexual simple en grado de tentativa” serían hoy los cargos, excarcelables, que estarían condicionados hoy por pericias psicológicas del Poder Judicial, cuyas conclusiones pueden reintegrarlo a la sociedad rápido, o bien derivarlo de una comisaría a un centro de salud mental.