Los bares y restaurantes de la comunidad autónoma podrán reabrir sus puertas a partir del viernes, según las autoridades manchegas, pero los clientes deberán descargarse en sus teléfonos móviles un código QR antes de entrar, lo que permitirá localizarlos si se produce un brote.

La decisión se produce tras un anuncio similar realizado el miércoles por la región de Extremadura.

La tasa de contagios durante los últimos 14 días en España hasta el jueves descendió a 540 casos por cada 100.000 personas, según los datos del Ministerio de Sanidad, marcando su nivel más bajo desde el 14 de enero y muy por debajo del pico de 900 casos alcanzado hace dos semanas.

El número total de casos aumentó en 17.853, hasta los 3,04 millones, mientras que el número de muertes subió en 513, hasta los 64.217.

El jefe de Emergencias Sanitarias de España, Fernando Simón, advirtió que todavía no se ha registrado un descenso claro de las víctimas mortales, pero espera que esto empiece a ocurrir a partir de principios de la semana que viene.

Se han producido protestas de trabajadores y propietarios de restaurantes por todo el país, y varias autoridades regionales han comenzado a relajar las restricciones impuestas al sector de la hostelería en diciembre.

Madrid y Cataluña suavizaron algunas medidas la semana pasada, mientras que un tribunal del País Vasco suspendió el martes una orden de cierre de bares y restaurantes en las zonas más afectadas de la comunidad autónoma, tras un recurso de las asociaciones empresariales.

Organizaciones del sector de la hostelería han presentado más de 20 recursos similares.