El gobernador de la provincia de Buenos Aires (PBA), Axel Kicillof, dijo ayer que el Fondo Monetario Internacional (FMI) “no podía pedir ajustes” porque la situación en el territorio bonaerense (y el interior del país) estaba al límite. Los analistas sugirieron que las expresiones de Kicillof estaban dirigidas al presidente Alberto Fernández. La explicación.

En diálogo con Radio 10, al gobernador bonaerense le consultaron si sus expresiones fueron dirigidas al Presidente. En vez de ser contundente con su negación (o afirmación si fuese el caso), Axel Kicillof prefirió contestar: “Solo intentan fomentar división y marcar como conflictos“. Así que podemos intuir que estuvieron dirigidas al mandatario nacional.

Acto seguido, sostuvo que él “advertía sobre una situación real, que es que hay que trabajar sobre ingresos y sobre precios porque la suba de precios por la situación internacional o por la concentración interna o la recuperación misma, no puede generar un deterioro de los ingresos de los trabajadores que están empezando a encontrar empleo. No podemos empezar a malograr eso”.

“Es una situación muy delicada y hay que reforzar las políticas estatales de mejora de ingresos y administración de precios”, añadió.