Sebastián Battaglia asume este martes como nuevo entrenador de Boca, luego de la salida de Miguel Ángel Russo. Era la Crónica de una Muerte anunciada, parafraseando Gabo.
Russo deja un equipo sin identidad, especialmente completamente alejado de la “garra xeneixe”, con un juego que exasperaba a quien lo veía por la televisión, hecho que le dio un Handicap ya que al no tener la presencia del hincha en la tribuna, no le llegaba el clamor de la hinchada.
El pase hacia atrás, repetido hasta el cansancio evidenciaba la orfandad de un plan de juego. Hoy Russo se va, con algunos logros pero no será con una ovación ya que Boca Juniors está en el penúltimo lugar de la tabla.