Examinamos qué es la ansiedad por lo dulce, por qué ocurre y qué puedes hacer para calmarla.
¿Qué es la ansiedad por lo dulce?
Para funcionar correctamente nuestro cuerpo necesita glucosa, un azúcar que proviene de los alimentos que comemos, aunque también se forma y almacena dentro del organismo.
La glucosa es la principal fuente de energía de las células, y se transporta a todas ellas a través del torrente sanguíneo.
La ansiedad por lo dulce puede ocurrir, por ejemplo, cuando pasamos mucho tiempo sin comer, puesto que nuestro cuerpo experimenta un descenso en los niveles de glucosa en sangre, por lo que el cerebro enviará una señal indicando que es necesario reponerla.
Aunque podemos incorporar azúcar con opciones saludables, como frutas, vegetales o cereales, es común optar por alimentos azucarados o ultraprocesados, ya que son de fácil digestión. Esto hace que al cerebro llegue rápidamente una señal de satisfacción y reposición de energía.
Otros factores que puede desencadenar una ansiedad por lo dulce son ciertos sentimientos, como el estrés. Bajo esta situación, el organismo produce una hormona encargada de prepararnos para reaccionar ante situaciones de peligro, llamada cortisol.
Al generar esta hormona, el cuerpo utiliza mucha energía, por lo que envía constantes señales de reposición que desencadenan en una ingesta de productos azucarados.
Recomendaciones para reducir el azúcar en la dieta
Una vez satisfecho, el cerebro genera endorfinas que dan una sensación de felicidad e hiperactividad. Sin embargo, estas tendrán un efecto acotado, ya que los alimentos que se utilizaron para obtener energía son de fácil digestión.
Esto provoca que la glucosa llegue rápido al torrente sanguíneo, causando un exceso de azúcar en sangre. Para equilibrar esta situación, el organismo produce una hormona llamada insulina, que se encarga de digerir la glucosa.