El verano es una época del año en la que el uso de electricidad tiende a aumentar debido al uso constante de sistemas de enfriamiento, como aires acondicionados y ventiladores. Esto no solo puede aumentar tus facturas de electricidad, sino también tener un impacto negativo en el medio ambiente. Afortunadamente, existen diversas formas de ahorrar electricidad durante los meses de calor sin renunciar a la comodidad. En esta nota, te ofrecemos consejos para reducir tu consumo de electricidad y mantener tu hogar fresco de manera eficiente.

Consejos para Ahorrar Electricidad en Verano:
Aprovechá las horas más frescas: Abre las ventanas temprano en la mañana y durante la noche para aprovechar la brisa fresca. Cierra las ventanas y cortinas durante las horas más calurosas del día para evitar que el calor entre en tu hogar.
Mantené tu aire acondicionado a una temperatura razonable: No es necesario que mantengas tu hogar a una temperatura muy baja. Configura tu termostato a una temperatura confortable, preferiblemente alrededor de 78°F (25-26°C) cuando estés en casa y aumenta la temperatura cuando no estés.
Utilizá ventiladores: Los ventiladores de techo o de pie pueden hacer que una habitación se sienta más fresca, permitiéndote elevar la temperatura del termostato sin sacrificar la comodidad.
Sellá las fugas de aire: Asegurate de que puertas y ventanas estén bien selladas para evitar que el aire fresco se escape y el calor entre. Puedes usar burletes o selladores para reducir las fugas de aire.
Mantené tus sistemas de enfriamiento en buen estado: Limpia los filtros de tus aires acondicionados regularmente y programa un mantenimiento anual para asegurarte de que funcionen de manera eficiente.
Cociná y usa electrodomésticos eficientemente: Cocina en horarios más frescos o utiliza electrodomésticos que generen menos calor. Asimismo, utiliza la lavadora y el lavavajillas con cargas completas.
Apagá luces y electrodomésticos cuando no los necesites: Las luces y los dispositivos electrónicos generan calor y consumen electricidad. Apagalos cuando no estén en uso.
Invierte en iluminación LED: Las bombillas LED son más eficientes y generan menos calor que las bombillas incandescentes o halógenas.
Optá por cortinas o persianas reflectantes: Utilizá cortinas o persianas reflectantes para bloquear la entrada de luz solar directa en tu hogar, reduciendo así la necesidad de enfriamiento.
Considerá la energía solar: Instalar paneles solares en tu hogar puede reducir significativamente tu dependencia de la red eléctrica convencional.
Ahorrar electricidad en verano no solo es beneficioso para tu bolsillo, sino también para el medio ambiente. Siguiendo estos consejos, podrás mantener tu hogar fresco y cómodo sin aumentar tus facturas de electricidad de manera desmesurada. Además, contribuirás a la conservación de recursos naturales y a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.