Cristina Kirchner convocó a una reunión del Consejo Nacional del PJ que se llevó a cabo durante la tarde de este martes. El encuentro se realizó en la histórica sede de Matheu 130, en la Ciudad de Buenos Aires. El objetivo central del encuentro era analizar la hilera de derrotas que sufrió el peronismo en las elecciones provinciales que tuvieron lugar en el inicio del calendario electoral.
La intención de la titular del partido fue discutir los pormenores de cada una de las seis elecciones que se realizaron hasta el momento. El peronismo perdió en los comicios constituyentes de Santa Fe, y en las elecciones legislativas de Jujuy, Salta, San Luis, Chaco y CABA.
En ese marco, los voceros que hablaron con la prensa una vez que terminó la reunión, señalaron que “se ha hecho un análisis de todos los distritos y de las próximas fechas del cronograma electoral en el país”.
“Fuimos analizando la situación de algunas provincias, como es el caso de la provincia de Salta o de Jujuy o Misiones. Tenemos un esquema nacional donde La Libertad Avanza tiene una presencia después de las elecciones y un programa de gobierno que está afectando la vida de los argentinos. Simplemente, como dijo un gran actor, la gente no llega a fin de mes. Obviamente, estamos preocupados por lo que pasa”, indicó el senador José Mayans.
Entre los temas a tratar estaba el impacto que han tenido los desdoblamientos de las elecciones provinciales y las consecuencias que pueden tener en los comicios que viene. El punto neurálgico de ese análisis está vinculado a la elección bonaerense que Axel Kicillof decidió desdoblar, lo que motivó una dura crítica del cristinismo y un sinfín de acusaciones cruzadas.
En la reunión de ayer por la tarde, la intención de la ex presidenta era discutir los detalles de las realidades electorales y cómo encarar los comicios que siguen en el calendario electoral. Sobre todo frente a la predominancia en los resultados de los partidos provinciales y los triunfos que cosechó el gobierno de Javier Milei.
El peronismo atraviesa una fuerte crisis de representación que se ha divisado con claridad en los resultados de las primeras elecciones del año. En la gran mayoría de los distritos fue dividido y no tuvo capacidad para ser realmente competitivo. La excepción fue la performance de Leandro Santoro en CABA, que quedó segundo, detrás del vocero presidencial Manuel Adorni.
La próximo disputa electoral será en Misiones, el 8 de junio, donde el PJ provincial fue intervenido por la gestión de CFK. El 29 de junio habrá elecciones a consejales, presidentes comunales e intendentes en Santa Fe, provincia en la que el peronismo está quebrado y con fricciones internas.
Ayer se confirmó que el 31 de agosto se realizarán las elecciones ejecutivas en Corrientes. Allí el PJ llevará como candidato a Martín “Tincho” Ascúa, el intendente de Pasos de los Libres, que recibió el apoyo de CFK y que emergió como candidato luego de la normalización del PJ correntido, que estaba intervenido.
Justamente, a la salida de la cumbre, se confirmó que la ex presidenta viajará a ese distrito el próximo sábado para participar de un acto. “El peronismo quiere gobernar la provincia de Corrientes con un gran frente electoral”, remarcaron.
Será la primera elección ejecutiva que el peronismo afronte en esta etapa como oposición nacional. La segunda ocurrirá el 26 de octubre, en sintonía con las elecciones legislativas nacionales, cuando se elija gobernador en Santiago del Estero. En esa provincia el peronismo, en todo su conjunto, está dentro del esquema político del actual gobernador Gerardo Zamora.
El 7 de septiembre serán las elecciones bonaerenses, que tanta discusión generaron en el peronismo bonaerense. La ex presidenta presionó a Kicillof hasta último momento para evitar que desdoble, pero no lo logró. El Gobernador decidió adelantar los comicios argumentando que es “inviable” organizar una elección concurrente con la nacional, que tenga dos sistemas de votación distintos.
En las elecciones nacionales, que se realizarán el 26 de octubre, se eligirá a los candidatos con la el sistema de Boleta Única Papel (BUP), mientras que en los comicios bonaerense se utilizará el sistema tradicional, de boleta papel. De fondo, claro está, existe una disputa político por la autonomía, la autroridad y la representación de un sector preponderante del peronismo de la provincia de Buenos Aires.
La ex presidenta activó la vida interna del PJ y quiere mostrarse encima del proceso electoral en las distintas provincias. Fue muy cuestionada por las intervenciones en Jujuy y Salta (la primera durante la gestión de Alberto Fernández) y el resultado que obtuvo el histórico sello partidario en el momento de la competencia.
El peronismo trata de encontrar respuestas en el medio del caos y la división. CFK quiere poner sobre la mesa los motivos de las derrotas y discutir cómo evitar que esa hilera de cachetadas electorales continúe durante el 2025. Es una tarea bien difícil.