Con la confirmación de las nuevas fechas fijadas para las elecciones de medio término, arreciaron desde el fin de semana las versiones acerca de un posible acercamiento entre el gobernador Juan Manzur y su vice, Osvaldo Jaldo, cuyo distanciamiento se cristalizó a partir de la designación del nuevo Defensor del Pueblo, a comienzos de marzo.

Los trascendidos apuntaban a una fuerte intervención de la Casa Rosada, tendiente a acercar a las máximas autoridades provinciales, e incluían un viaje de ambos a Buenos Aires y la posibilidad de que, tras la reunión, se acordara la conformación de una lista de unidad encabezada por ellos.

La decisión de Jaldo de viajar (que se produjo ayer) a la Capital Federal acompañado por el legislador Daniel Deiana, el intendente de Banda del Río Salí Darío Monteros, su esposa la diputada Gladys Medina, Jesús Salim, funcionario de la Anses y la parlamentaria nacional Mabel Carrizo, parecía confirmar los trascendidos.

Pero fuentes muy cercanas al gobernador Manzur descartaron de plano cualquier posibilidad de acercamiento, confirmando que el mandatario no tiene pensado seguir el mismo rumbo que la comitiva encabezada por Jaldo. Más aún, confirmaron que el titular del PE tiene agenda para mañana en Tucumán.

En cuanto a la presencia en el vuelo que abordaron el vicegobernador y sus acompañantes de los diputados manzuristas Pablo Yedlin y Carlos Cisneros, además del secretario de Relaciones Económicas internacionales Jorge Neme, desde Casa de Gobierno aseguraron que se trató de una simple coincidencia, atribuyendo su viaje al cumplimiento de sus obligaciones habituales.