Un trabajo publicado en The New England Journal of Medicine analizó a estas variantes, comparándolas con las anteriores, y concluyó que al ser más escurrizidas frente a la inmunización podrían llevar a un resurgimiento de casos este verano.
Por supuesto, la vacunación sigue siendo esencial para si, la persona se infecta, tenga una forma leve de COVID-19.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) estima que en los Estados Unidos, el 94.7% de la población de 16 años en adelante tiene anticuerpos contra el coronavirus, ya sea a través de la infección o la vacunación.
Se está estudiando cuán diseminadas están estas variantes a nivel mundial.