“Vamos a bajar el Impuesto a la Salida de Divisas (ISD) en un punto en el año 2022, a razón de 0,25 puntos por trimestre”, dijo el mandatario en un diálogo con periodistas en la sede presidencial en Quito.
Agregó que la medida entrará en vigencia el 1 de enero próximo y que “todas las importaciones por las que se paga el ISD (…) ya no pagarán el 5%”, lo que se irá reduciendo hasta el 4%.
Lasso, quien asumió en mayo pasado, señaló: “Gradualmente iremos bajando impuestos en la medida en que la situación económica del país lo permita”.
El ISD fue aplicado por el gobierno del expresidente socialista Rafael Correa (2007-2017) para evitar la salida de la divisa estadounidense. Ecuador está dolarizado desde el año 2000.
El pago es obligatorio para quienes dejan el país llevando más de tres salarios básicos (por encima de 1.200 dólares), y también se aplica en el caso de las transferencias y envíos a través del sistema financiero.
Empresarios y analistas destacaron el anuncio de Lasso.
“Excelente noticia para ir desmontando este impuesto que encarece todos los bienes para producir y de consumo”, expresó el presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), Felipe Rivadeneira, a través de su cuenta en Twitter.
El economista Alberto Acosta Burneo, del consultor Grupo Spurrier, sostuvo por esa misma red social que la reducción del ISD beneficiará “a todos”. “Libera el flujo de capitales y nos permitirá atraer capitales”, señaló.
Las importaciones de Ecuador entre enero y octubre de 2021 alcanzaron unos 20.647 millones de dólares, contra exportaciones por 21.559 millones de dólares.