En ese sentido, a través del titular de la repartición Federico Nazur, la Provincia consideró que se  “han vulnerado las reglas fundantes de la competencia originaria de la Corte Nacional establecidas por la Constitución Nacional, así como la inveterada jurisprudencia de ese mismo Tribunal que impide la intromisión en las autonomías provinciales cuando la cuestión fue objeto de tratamiento y resolución por parte de la justicia local, en la especie un fallo de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán que constituye un típico acto de derecho público local, transgrediendo el artículo 117 de la Constitución Nacional” (competencia originaria y exclusiva de una provincia).

En realidad lo que dice el Dictamen de la Fiscalía de Estado tucumana, es más o menos que Constitucionalmente el tema de Manzur está fuera del ámbito jurisdiccional de la Corte Suprema de la Nación.

Es decir: una intromisión lisa y llana.

Y dictamen lo aclara: “la asunción de la competencia originaria en el caso y la emisión de la cautelar produjeron una afectación del sistema federal de gobierno y una invasión a la autonomía provincial (Art. 5 y 122 Constitución Nacional), ante la falta de configuración de la cuestión federal invocada dogmáticamente”.

Una Omisión de la Constitución tucumana

Como lo dice Nazur,  “la asunción de la competencia originaria en el caso y la emisión de la cautelar produjeron una afectación del sistema federal de gobierno y una invasión a la autonomía provincial (Art. 5 y 122 Constitución Nacional), ante la falta de configuración de la cuestión federal invocada dogmáticamente”.

Esto es cierto: la Carta Magna provincial ni Avala ni Prohíbe la postulación origen del conflicto Interpoderes. Por ello al ser consultada la Corte tucumana falló a favor de la postulación, advirtiendo que para futuro esta debía ser solucionada por una Ley al efecto.

Que la postulación de Manzur no sea del gusto de la oposición no está en cuestión. Es Opinión nada más.

Tampoco es del gusto de sectores internos del Partido Justicialista, pero eso no impide que esté avalado por un fallo del máximo organismo de la Justicia de Tucumán.

Por lo tanto la Cautelar de la Corte Nacional se transforma a ojos vista como un Fallo Político. Y le da la razón a quiénes afirman que la Corte nacional es un brazo político de Cambiemos o como se llame ahora.

De todas maneras la solución debe ser rápida. O generará daños colaterales en los participantes de los comicios. En lo económico.

Si el Frente de Todos da brazo a torcer  y reemplaza a su candidato hay un abanico muy grande para reemplazarlo. Con prestigio y trayectoria, como Alfredo Dato, Gabriel Casas, Fernando Juri, o mujeres como Carolina Vargas Aignasse, etc.

O como parece el Frente de Todos seguirá con la postulación original.

O  sea cono un conflicto de poderes a la Vista.

Veremos