El Gobierno nacional evalúa una rebaja de aranceles para productos farmacéuticos y una reforma legal para reforzar la protección de la propiedad intelectual, como parte de las condiciones que negocia con Estados Unidos para sellar un acuerdo comercial de reciprocidad arancelaria.
El equipo del ministro de Economía, Luis Caputo, ya trabaja en las opciones técnicas para avanzar en esta estrategia, aunque en el oficialismo advierten que los cambios no serán inmediatos. “Lo vamos a hacer, pero no va a ser en el corto plazo. Estamos afuera del mundo en términos de propiedad intelectual. No va a ser fácil volver”, admiten en la Casa Rosada.
La intención oficial es adaptar el marco legal argentino a los estándares internacionales, lo que incluye el ingreso al Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT) de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (WIPO).
Algunos cambios se canalizarán vía decreto presidencial, como la reducción de aranceles, mientras que otras reformas, especialmente las vinculadas a derechos de propiedad intelectual, requerirán el impulso de un proyecto de ley.
La iniciativa responde a los reclamos históricos de Estados Unidos, que quedaron plasmados en informes como el del IP Index 2024 elaborado por la Cámara de Comercio norteamericana, que ubicó a la Argentina en el puesto 45 de 55 países, con un puntaje de apenas 35%, muy por debajo del promedio regional (42%) y de los países líderes (91%).
El reporte destaca altas tasas de piratería, deficiencias en la protección de derechos de autor, escasa incentivos para medicamentos huérfanos y estándares de patentabilidad desalineados. También hace foco en fallas en la protección de datos confidenciales exigidos para la aprobación de medicamentos, hoy regulados por la Ley 24.481.
La presión para avanzar en estos cambios también llegó desde el plano diplomático. Durante su reciente visita a la Argentina, el secretario de Salud estadounidense, Robert F. Kennedy Jr., trasladó estas preocupaciones en encuentros con el presidente Javier Milei y el ministro de Salud, Mario Lugones.
Estados Unidos reclama mayor transparencia en el uso de indicaciones geográficas y la garantía de que los nombres genéricos no queden restringidos, especialmente ante el avance del acuerdo Unión Europea–MERCOSUR.
Además, el último informe de la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR) apuntó directamente contra los mercados informales como Once y La Salada, esta última clausurada tras la detención de su organizador, Jorge Omar Castillo. En ese marco, el secretario de Coordinación de Producción, Pablo Lavigne, viajará en los próximos días a Washington para seguir con las negociaciones.
Mientras tanto, la ANMAT ya oficializó una baja en los derechos de exportación para psicotrópicos, estupefacientes y precursores químicos, a través de la disposición 11.374/24, en línea con la estrategia de acercamiento a los estándares internacionales.