El Gobierno nacional postergó para marzo el aumento del impuesto a los combustibles que incide directamente en el valor de la nafta y el gasoil. Sin embargo, pese a la continuidad del congelamiento de la carga tributaria, en las primeras horas de hoy se registraron nuevas subas en los precios de la empresa estatal YPF.
A través del decreto 107/2024, publicado esta madrugada en el Boletín Oficial, se establecieron los incrementos en los montos de los impuestos fijados para los combustibles, correspondientes al primer, segundo, tercer y cuarto trimestres del año 2023, debido a que habían quedado desactualizados.
De esta manera, el Gobierno fijó que el aumento del primer y segundo trimestre de 2023 tenga efecto para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil a partir del 1° de marzo de 2024. Mientras tanto, los demás incrementos están previstos para el 1° de abril y el 1° de mayo.
En el considerando de la norma, el Ejecutivo plantea que esta decisión tiene como objetivo “iniciar un proceso de regularización de los referidos incrementos remanentes, resulta razonable diferir parcialmente sus efectos, así como los de la actualización correspondiente al cuarto trimestre calendario del año 2023″. De igual forma, la Secretaría de Energía, que conduce Eduardo Rodríguez Chirillo, ya había adelantado que espera que el sendero de “sinceramiento” en el precio de los combustibles se dé gradualmente tras los fuertes incrementos acumulados en los últimos meses.
Más allá de la postergación de la actualización de la carga tributaria, la petrolera YPF igual aplicó un nuevo aumento en el precio de las naftas y el gasoil.