La intendenta Rossana Chahla hizo historia al pronunciar su primer discurso ante el Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar este cargo desde la fundación de la ciudad.

Chahla describió un panorama desolador al asumir su mandato, destacando el “estado de abandono y desidia” en el que encontró la ciudad, desde la falta de mantenimiento en espacios públicos hasta la corrupción institucional en la gestión de recursos.

Uno de los puntos más críticos señalados por la intendenta fue el sistema de alumbrado público, con más de 12.300 luminarias apagadas, dejando a aproximadamente 20.000 vecinos en la oscuridad.

Para abordar la crisis, Chahla anunció la convocatoria a universidades públicas para realizar una auditoría exhaustiva de las finanzas municipales, revelando una deuda que superaba los $5 mil millones y una situación precaria en el parque automotor y las instalaciones públicas.

Además, la intendenta resaltó la necesidad de revisar la estructura de personal del municipio, destacando la presencia de empleados “ñoquis” que percibían altos salarios sin realizar ninguna tarea y la contratación de personal sin antecedentes laborales previos.