En una jornada marcada por la emoción y el recuerdo, Estudiantes de La Plata superó este martes por 2-0 a Carabobo de Venezuela en el estadio Jorge Luis Hirschi, por la sexta fecha del Grupo A de la Copa Libertadores, y se metió en los octavos de final como líder de su zona.

El encuentro estuvo cargado de simbolismo, ya que se disputó en el día del fallecimiento de Juan Ramón Verón, ídolo y campeón con el club, padre de Juan Sebastián Verón, actual presidente del Pincha. Los hinchas le rindieron homenaje con un respetuoso aplauso antes del pitazo inicial y, especialmente, cuando el reloj marcó el minuto 11, en alusión al número que usó la “Bruja” durante su carrera.

En lo estrictamente futbolístico, el equipo de Eduardo Domínguez resolvió el partido en los primeros 25 minutos del primer tiempo. Edwin Cetré, a los 10’, abrió el marcador con una gran acción individual: enganchó desde la izquierda y colocó la pelota junto al palo. Más tarde, a los 24’, Luciano Giménez empujó la pelota con sutileza tras un rebote generado por un remate de Cristián Medina, decretando el 2-0 definitivo.

Con ese resultado y la victoria de Botafogo 1-0 sobre Universidad de Chile en Brasil, Estudiantes aseguró el primer puesto del Grupo A, lo que le permitirá enfrentarse en la próxima ronda a un equipo clasificado como segundo.

El complemento tuvo escasas emociones, con un equipo platense abocado a manejar la ventaja y sostener el resultado. Carabobo, por su parte, intentó presionar alto sin éxito, y terminó despidiéndose del certamen sin triunfos, con solo un punto, producto del empate ante la U chilena en la tercera jornada.

El Pincha cerró una noche redonda: avanzó en la Copa como líder y homenajeó con altura y fútbol a una de sus máximas glorias.