El gobernador Osvaldo Jaldo mantendrá reuniones con los representantes de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) y la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), con el objetivo de garantizar el servicio de transporte público en caso que a nivel nacional se avance con el paro de 72 horas.
Este lunes se vence el plazo de la conciliación obligatoria y si los empresarios de las provincias del interior no cumplen con el pedido de aumento salarial solicitado por UTA a nivel nacional, no habrá servicio de colectivos en todo el país, excepto en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
El gremio apunta a que los choferes del interior perciban idéntico incremento salarial que el otorgado a los del AMBA. Los trabajadores solicitan una suba escalonada hasta agosto, con un porcentaje acumulado de 50% desde enero. El objetivo es que el sueldo básico de los choferes sea de $150.000.
Según informó Los Primeros, Jaldo fijó su postura sobre la problemática que atraviesa el transporte público, advirtió que no aceptará presiones y que trabajará para que el paro no afecte a Tucumán. “Acá hay que negociar con los colectivos en marcha y prestando el servicio público de pasajeros. Caso contrario, se va a reanalizar el tema del incremento del boleto, el aporte provincial, la SUBE… Nosotros estamos tratando de salvar 3.500 fuentes laborales, pero con presiones, no. Voy a trabajar para que no se pare. Si no, sin dudas va a afectar la relación”, dijo.