El consumo de carne vacuna, un alimento esencial, continúa su tendencia a la baja, impactando especialmente a los sectores de menores recursos.
En los hogares por debajo de la línea de pobreza, la sustitución de cortes de carne por alternativas más económicas como pollo, cerdo y productos básicos como fideos, arroz o polenta se ha vuelto una práctica habitual, de acuerdo con Ámbito.com.
En las últimas semanas, los precios de los principales cortes de carne vacuna han experimentado aumentos significativos.
Según datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), entre finales de marzo y la presente semana, el roast beef aumentó un 36%, pasando de $9.759 a $13.300. La carnaza común también registró un incremento del 36%, de $7.381 a $10.100. El cuadril subió un 33%, de $12.719 a $17.500, y la paleta un 32%, de $10.152 a $13.400.
Otros cortes de consumo popular como la nalga, el lomo y la bola de lomo también sufrieron aumentos considerables, que oscilaron entre el 16% y el 28%.
Este nuevo salto que dio la carne, deriva también en que los precios de los alimentos acumulen un alza del 3,4% en abril, de acuerdo al informe inflacionario de la consultora LCG correspondiente a la cuarta semana del mes en curso.
Aumenta la inflación en alimentos
El reporte reflejó que en las últimas cuatro semanas, los productos de la canasta básica tuvieron una suba promedio de 3,4% y del 2,5% de punta a punta en ese período. La variación mensual está liderada por la carne, que presentó un aumento cercano al 7% en las semanas relevadas.
Al desglosar el comportamiento de los diferentes rubros, el relevamiento indicó que en el cuarto mes del año solo dos de las diez categorías relevadas se ubicaron por encima del promedio, que termina el mes en 3,4%.
Así, el rubro carne duplicó el dato general al trepar 6,9% en las últimas cuatro semanas. Le siguieron los condimentos que escalaron 5,5% en el mismo período. Por el contrario, el aceite y las verduras registraron bajas de hasta 1,6% en sus precios.
En la medición semanal, la consultora remarcó que los precios de las 10 categorías que releva no registraron variaciones en los últimos 7 días, precisando que en ese lapso, seis categorías de productos básicos mostraron retrocesos de hasta 2,8% en sus precios, como en el caso del azúcar.
Este indicio de cierta estabilidad de los precios se da tras los idas y vueltas entre los supermercadistas y los proveedores por los aumentos que se querían aplicar luego de la salida del cepo cambiario y la variación en el valor del tipo de cambio.