Ali Ghali es el cuarto alto mando de la Yihad Islámica muerto desde que Israel comenzó a atacar Gaza en incursiones efectuadas antes del amanecer del martes. Entre los muertos en los ataques hay al menos cinco mujeres y cinco niños.
El ejército dijo que Ghali había ayudado a supervisar el lanzamiento de cohetes contra Israel en los últimos días, así como en anteriores rondas de combates. La Yihad Islámica es un grupo militante respaldado por Irán y aliado de Hamás, que gobierna el enclave.
Las sirenas antiaéreas sonaron en zonas del sur de Israel próximas a la Franja de Gaza y las imágenes de Reuters mostraron cohetes interceptados por la defensa aérea israelí en el cielo nocturno. Los aviones israelíes alcanzaron objetivos, entre ellos un puesto de mortero en el norte del enclave.
El ejército israelí afirmó haber atacado 158 objetivos en Gaza, mientras que esta semana se lanzaron al menos 523 cohetes hacia Israel y 380 cruzaron la frontera, pero las defensas aéreas interceptaron el 96% de los que amenazaban con alcanzar objetivos.
También afirmó que más de 100 cohetes habían fallado en el disparo, matando a cuatro palestinos, entre ellos una niña de 10 años, una afirmación que la Yihad Islámica negó por ser “completamente incorrecta”.
“Una vez más, Israel intenta eludir su responsabilidad por la muerte de civiles con mentiras e invenciones”, declaró Dawoud Shehab, portavoz de la Yihad Islámica.
Egipto tenía previsto recibir más tarde en El Cairo a Mohammad al-Hindi, alto cargo de la Yihad Islámica, en el marco de los esfuerzos de mediación para poner fin a los combates, dijeron a Reuters dos responsables de la Yihad Islámica y un diplomático extranjero.