Como primer punto, la Fiscalía solicitó la prórroga de la prisión preventiva contra los imputados con los que no se llegó a un acuerdo para una salida alternativa.
El fiscal pidió (ante la vigencia de los peligros procesales de fuga y obstaculización del proceso), la extensión de las medidas privativas de la libertad por tres meses más contra los hermanos Franco y Moisés Sánchez, Juan Carlos Montiel y Oscar Hernán Muro.
Gallo destacó que era necesario que sigan detenidos ante la finalización de la investigación y previo a pasar a la etapa de control de acusación y admisibilidad de prueba.
El 29 de octubre pasado, se emitió el requerimiento de apertura a juicio con pretensiones punitivas de 11 años de prisión contra los Sánchez, 13 para Moisés y 8 para Muro.
“Hay que tener en cuenta la expectativa de las penas y también la información que manejan, que les permite amedrentar a víctimas y testigos”, argumentó el fiscal. La jueza interviniente hizo lugar al plazo solicitado.
Las penas
A continuación, el fiscal expresó los términos de los convenios de juicio abreviado a los que arribó el MPF con las defensas de los otros 10 imputados y las penas correspondientes.
Las mismas quedaron fijadas de la siguiente manera: Damián Ezequiel Ruiz, 15 años de prisión; Daniel Pablo Lazarte, 10 años de prisión; Braian Jonathan Gutiérrez, Ariel Marcelo Lazarte y Hernán Gustavo Martínez, 4 años; Francisco José Soria, Ángel Fabián Reynaga y Cristian David Vera, 5 años; Noemí Alejandra Martínez (declaró como testigo protegida) y Manuel Alejandro Ponce, tres años de prisión de ejecución condicional.
Como parte del procedimiento, cada uno de los acusados tuvo que reconocer su responsabilidad penal en los hechos ilícitos que se les imputan para arribar al acuerdo.
La fiscal auxiliar María José Agüero, realizó la descripción de las numerosas pruebas contra los acusados, obtenidas en el marco de las diferentes medidas efectuadas en la investigación.
A continuación, la jueza dispuso que la audiencia prosiga hoy, viernes 5 de noviembre.
Modalidad delictiva
Los detenidos están acusados de conformar un grupo organizado con el propósito de cometer, en forma permanente y sistemática, ilícitos consistentes en el apoderamiento ilegítimo (en forma violenta y mediante el uso de armas de fuego), de camionetas de alta gama, dinero con la que cuentan personas encargadas de recaudación o cobro de locales comerciales; como también siguiendo camiones encargados de distribuir mercadería, logrando su interceptación, para luego de amedrentarlos con el uso de armas de fuego, desapoderarlos del dinero y mercadería, sustrayendo además objetos personales de las víctimas como ser notebooks, joyas, celulares y electrodomésticos; para todo lo cual contaban anticipadamente con información muy precisa respecto a las víctimas a abordar y donde cada uno cumplía un rol definido.