Romano, marcado crítico del jaldismo durante las internas del Frente de Todos, contó que la reunión con el gobernador en uso de licencia fue para dialogar sobre el desafío que tiene el peronismo en la gestión institucional y de cara a la próxima campaña electoral.
Con la idea de aumentar el caudal de votos en noviembre, Luis Romano ratificó un concepto que se repite en el peronismo tucumano, “la interna ya pasó”, y aseguró que “el enemigo no está en el adentro del peronismo, el enemigo es Juntos por el Cambio”.
Luego del cónclave en el despacho de Casa Rosada, el titular de la CNRT en Tucumán analizó como una reparación histórica para el interior del país el lugar ocupado por Juan Manzur y manifestó que “desde el MUP vamos a aportar toda nuestra fuerza y militancia para tratar de revertir el resultado en las jurisdicciones que nos fueron adversas y también contribuir a que el Frente de Todos conserve y amplíe el caudal de votos cosechado en Tucumán en las PASO del 12 de septiembre”.
La obra pública es el pilar fundamental que indicó Romano para impulsar la reactivación económica, con el foco en avanzar con los convenios firmados para obras. Sin esbozar críticas para el nuevo responsable del ejecutivo provincial, el dirigente nacido en Alberdi destacó la reunión interministerial que se dio en Casa Rosada, donde ministros provinciales y nacionales se sentaron en una misma mesa junto a Manzur y Osvaldo Jaldo.