La tormenta Eunice, que se gestó en el Atlántico central y se desplazó desde las Azores hacia Europa, representa un peligro para la vida, según dijo la Oficina Meteorológica británica.

La tormenta azotó el oeste de Inglaterra, tocando tierra en Cornualles, donde las olas azotaron la costa, enviando columnas de espuma sobre los tejados de las casas, mostraron imágenes de Reuters.

Una mujer murió en Londres cuando el coche en el que viajaba fue aplastado por un árbol y un hombre que conducía un vehículo en Liverpool falleció a causa de escombros que salieron despedidos. Otro hombre murió después de que un vehículo colisionó con un árbol caído en el condado de Hampshire, al sur de Inglaterra.

En los Países Bajos, tres personas murieron a causa de árboles derribados. En Bélgica, los fuertes vientos derribaron una grúa sobre el tejado de un hospital y un británico murió tras ser expulsado de su barco al agua.

Un hombre murió en Irlanda tras ser golpeado por la caída de un árbol mientras limpiaba los escombros de la tormenta, informó RTE.

Los fuertes vientos en Londres destrozaron el techo blanco del estadio O2, en el que se han presentado estrellas de la música popular como los Rolling Stones, Beyonce y Rihanna. Los altos edificios de Londres temblaron cuando el viento atravesó Canary Wharf.

En Gales, las olas se abatieron sobre el paseo marítimo de Aberystwyth, algunas tan altas como las casas. Más de 100.000 personas se vieron afectadas por cortes de electricidad al caerse cables y desplomarse árboles centenarios.

“La tormenta Eunice está golpeando con fuerza”, dijo el meteorólogo jefe de la Oficina Meteorológica, Frank Saunders. “Solo emitimos avisos meteorológicos rojos cuando creemos que hay una amenaza para la vida por el tiempo”.