Momentos de mucha tensión se vivieron durante la segunda sesión de entrenamientos libres de cara al Gran Premio de Portugal de MotoGP, la tercera fecha del campeonato de motociclismo más importante del planeta. El japonés Takaaki Nakagami preocupó a todos en el Autódromo Internacional do Algarve de Portimão al sufrir un brutal accidente.

Todo transcurría con normalidad hasta que Nakagami, de 29 años, quien encara su cuarta temporada consecutiva con el equipo LCR Honda Idemitsu, perdió el control de su máquina y se dio un golpe mayúsculo, aunque sin sufrir grandes consecuencias.

En el momento que afrontar su primera vuelta rápida, se desplomó en la bajada cerca la curva 1 del trazado portugués y terminó deslizándose decenas de metros en una pendiente hacia abajo sin poder detenerse. A su vez, su moto quedó completamente destrozada.

Pese a lo que se ve en las imágenes, Nakagami se sometió a un examen rápido en el que se comprobó que no tenía huesos rotos ni lesiones graves. Una vez que corroboraron que estaba en condiciones físicas de continuar con las prácticas, volvió a la acción.

Y vaya si salió fortalecido de su tremendo golpe y de la revisión médica, porque con su segunda moto pudo dar algunas vueltas más y terminó posicionándose entre los 10 primeros de la jornada.

El italiano Francesco Bagnaia (Ducati) fue quien realizó el mejor tiempo de las dos primeras sesiones de entrenamientos libres en Portimão, donde se decretó el regreso de Marc Márquez tras una larga inactividad por lesión.

El piloto español de 28 años, seis veces campeón del mundo en MotoGP (2013, 2014, 2016, 2017, 2018 y 2019), hizo un convincente sexto mejor tiempo en su vuelta a las pistas tras quedar marginado durante nueve meses por una fractura en el húmero derecho, producto de una caída que sufrió en el primer Gran Premio de 2020, en julio pasado. Tuvo que ser operado hasta en tres ocasiones, la última de ellas en diciembre, pero ya parece estar recuperado y listo para volver a dar batalla como en sus mejores años.