Siete personas que saltaron del autobús en llamas fueron trasladadas a un hospital en la capital del país, Sofía, y se encontraban en condiciones estables, según el personal médico. Las siete presentaban quemaduras y una de ellas tenía una pierna rota.
El Ministerio del Interior búlgaro dijo que 45 personas murieron en el siniestro, lo que lo convierte en el accidente de autobús más mortífero de la historia del país balcánico.
El ministro del Interior en funciones del país, Boyko Rashkov, dijo que los cuerpos fueron encontrados “agrupados en el interior y calcinados”.
“La imagen es aterradora, espeluznante. Nunca había visto algo así”, dijo a los periodistas en el lugar de los hechos.
La causa del accidente no estaba clara, pero el autobús parecía haber chocado contra una barrera de la autopista antes o después de incendiarse, según las autoridades búlgaras.
El accidente se produjo en la autopista de Struma, a unos 30 km al oeste de Sofía, alrededor de las 2:00 de la madrugada hora local (0000 GMT), según las autoridades búlgaras.
El autobús regresaba a Skopje, capital de Macedonia del Norte, tras un viaje de fin de semana a Estambul, un trayecto de unos 800 km (500 millas).
“GRAN TRAGEDIA”
El jefe de los servicios de investigación búlgaros, Borislav Sarafov, dijo que cuatro autobuses de una agencia de viajes de Macedonia del Norte entraron en territorio búlgaro procedentes de Turquía la noche del lunes.
“Un error humano del conductor o un fallo técnico son las dos versiones iniciales del accidente”, dijo Sarafov.
Las imágenes de televisión mostraron el autobús carbonizado y destruido por el fuego en medio de la autopista, que estaba mojada por la lluvia.