Un niño de 8 años que se encontraba en el interior del predio de una Iglesia en el barrio Río Dulce -en compañía de su madre y su hermano menor- fue salvajemente atacado por un perro Pitbull, quien le provocó graves lesiones en el brazo derecho.

Según denunció Noelia Juárez -de 25 años, residente en el barrio Río Dulce- ante los efectivos de la

Comisaría Quince, el grave episodio se registró pasadas las 23, cuando ella se encontraba en el interior del templo y escuchó el grito de su hijo Axel Lautaro.

Noelia expresó que cuando salió a ver qué sucedía, una mujer estaba asistiendo al pequeño, quien tenía un profundo corte en una de sus extremidades superiores. Ella de inmediato corrió hasta el puesto del Puente Carretero para pedir ayuda.

Con asistencia de la vecina, Noelia y su pareja -Miguel Alejandro Guzmán, padre del menor- subieron a la víctima en un remís y lo trasladaron al Centro Provincial de Salud Infantil donde fue asistido de urgencia.

Los galenos, ante la gravedad de la lesión inmediatamente le hicieron un raspaje y durante la jornada de ayer, cerca de las 9 de la mañana aproximadamente, lo intervinieron quirúrgicamente.

Su mamá manifestó que el perro es propiedad de un vecino colindante a la iglesia. Expresó que el animal saltó la tapia perimetral y atacó a su hijo, quien se interpuso delante de su hermanito menor, al ver al animal enfurecido correr hacia él.

Además Juárez expresó a la policía que cuando fue a la casa del dueño del perro a reclamarle la situación, éste le contestó que “a los animales no se los ata”. La Dra. María Teresa

Montes ordenó que personal de Canes arribe a la casa para realizar un estudio de las condiciones del perro. Además pidió que efectivos de la Comisaría 15 realicen un relevamiento vecinal.