De acuerdo a las primeras averiguaciones, el oficial de la PFA terminaba su jornada laboral y se encontraba de regreso a su domicilio. En cuanto ingresaba a su vivienda advierte que un auto Renault Clio de color gris sin chapa patente se detiene allí.
En ese momento, el sujeto a bordo del automóvil desciende del mismo y lo enfrenta asegurando que venía detrás de él para informarle de un presunto choque que habrían tenido ambos. El oficial de la PFA se identifica ante el sujeto solicitándole sus datos.
El impostor no accede ante el pedido del oficial. En el interior del auto había algunas prendas de uniforme, un barbijo con el logo de la Policía y una funda para guardar un arma de fuego. El efectivo de la PFA decide esposar al hombre y llamar al 911 para informar la situación.
Cuando se presenta el cuerpo policial en el lugar no logran identificar como miembro de la Policía al detenido y además, descubren que el auto en el que circulaba el mismo mantenía un pedido de secuestro por robo.
Finalmente, el hombre fue detenido y trasladado a la Comisaría 9na. quedando a la espera de la intervención del Juzgado Criminal en turno para tomar su declaración.