TUCUMÁN.- Un emotivo reencuentro tuvo lugar este miércoles 2 de junio en el que se celebra el Día Nacional del Perro, gracias a policías de la Unidad de Investigaciones de Yerba Buena que lograron recuperar a una cachorra Chow Chow que había sido robada. “Hoy mi familia está completa de nuevo gracias a la policía”, expresó su dueña.
 
Fabiana Díaz contó que Mia llegó a su familia el 7 de abril, como un regalo de cumpleaños para su hijo. “Mi hija, que ya falleció, tenía un peluche igualito a Mia, por lo que es parte importante de nuestra familia desde el primer momento y significa mucho para nosotros. La queremos y ella nos quiere también”, contó emocionada al reunirse con su mascota.
 
“La actitud del Comisario Héctor Marín y todos los policías de la Unidad de Investigaciones de Yerba Buena que nos ayudaron, fue excelente. No se portaron de 10, se portaron de 20. Inmediatamente tomaron acción y fueron a buscarlo porque entendieron lo importante que es para nosotros. Tengo cinco amores: mis dos hijos y mis tres perros y hoy mi familia está completa de nuevo gracias a la policía”, expresó agradecida Fabiana.
 
En la tarde del lunes 10 de mayo, Mia se encontraba jugando con Estrella y Káiser, los otros dos perros de la familia, cuando se escaparon de su casa de Américo Vespucio y Pueyrredón. El hijo de Fabiana escuchó ladrar al caniche y el dogo y vio como dos personas a bordo de una motocicleta se llevaban a la perrita de tres meses.
 
“Salimos a buscarla, pero no la encontramos, por lo que pusimos la denuncia en la Comisaría 13°. Además, viralizamos en las redes sociales su foto para conseguir cualquier dato que nos ayudara a recuperarla. Días después de orar por ella, recibimos un dato anónimo de que había sido vista en el Barrio 2 de Septiembre, por lo que dimos aviso en la Brigada”, detalla Fabiana sobre el suplicio de la familia.
 
El Comisario Marín, quien supervisa la división junto al Subcomisario Nicolás Marchant, y trabajó junto a la Unidad Fiscal de Decisión Temprana, contó cómo fue el procedimiento. “Apenas tomamos conocimiento de la pista que existía sobre el paradero de la perrita, identificamos a las personas señaladas y ubicamos el domicilio.
 
El equipo fue al lugar y se entrevistó con estas personas que efectivamente tenían en su poder al animal. Según dijeron, la habían comprado días atrás de buena fe, pero la entregaron voluntariamente para que pueda regresar a su hogar. Nos parecía muy importante recuperar a la cachorrita, no solo por el valor económico de esta mascota sino más que nada por su valor sentimental”, cerró.