Un posible incumplimiento de Evergrande, el mayor emisor de bonos basura de Asia, provocó una fuerte ola de ventas en Wall Street y amplió los diferenciales de los bonos estadounidenses el lunes, aunque los mercados se han estabilizado desde entonces.
“En términos de las implicaciones para nosotros, no hay mucha exposición directa a Estados Unidos. Los grandes bancos chinos no están tremendamente expuestos, pero preocuparía que afecte las condiciones financieras globales a través de canales de confianza global y ese tipo de cosas”, afirmó Powell a periodistas tras la reunión de política monetaria de la Fed.
“Pero no trazaría un paralelo con el sector corporativo de Estados Unidos”, agregó.