Sin embargo, los expertos alertan sobre otra consecuencia que puede tener sobre la salud, específicamente en las manos, ya que causa una excesiva tensión sobre los músculos, tendones y ligamentos.

Por sus características cada vez más realistas, desafíos constantes, y, muchas veces, tramas atrapantes, los videojuegos pueden generar conductas compulsivas y uso persistente.

“Absorben las capacidades de atención del usuario por el alto grado de interacción, ofrecen un sistema de recompensa bastante rápido y atractivo. La posibilidad del anonimato e interacción en el mundo virtual permite construir un alias con una identidad que suple deficiencias emocionales y cumple con expectativas de una manera casi inmediata”, explicó el doctor Leopoldo Rendón en una publicación de HolaDoctor.

Actualmente, alrededor de 60% de la población estadounidense juega videojuegos entre 2 y 4 horas por día, estima la Asociación Comercial de la Industria de los Videojuegos en EE. UU. (ESA). Los usuarios tienen en promedio 30 años.

Este hábito que ya está instalado en la vida de muchas personas a lo largo del mundo, es ampliamente estudiado y cuenta con muchas investigaciones. En el archivo digital de los Institutos Nacionales de la Salud ( PubMed), pueden encontrarse más de 21.000 trabajos al respecto.

La adicción a los videojuegos es un trastorno mental, según la OMS

Según la evidencia disponible, el abuso de videojuegos suele vincularse a distintos problemas de salud, como:

Cambios en la apariencia física: incluye piel pálida, bolsas debajo de los ojos, sobrepeso o mala postura. Todos estos problemas son consecuencia de no dormir suficiente, no tomar sol con regularidad y llevar una dieta poco saludable.

Convulsiones: esto se debe a que un 5% de las personas que sufren de epilepsia padecen una forma, conocida como fotosensible, en la que las luces intermitentes podrían provocar convulsiones. Aunque las pantallas de computadoras no representan un riesgo alto, las empresas de videojuegos deben adecuarse a estándares especiales para minimizar todo tipo de peligro.

Problemas de salud mental: existen asociaciones entre los videojuegos y problemas como el comportamiento agresivo, las malas calificaciones en la escuela, el déficit de atención o el aislamiento.