En un reciente pronunciamiento, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, abordó la compleja situación económica que enfrenta Argentina, centrándose en la problemática de la disminución de la coparticipación federal, un tema que repercute en el funcionamiento financiero de todas las provincias del país. En este contexto, Jaldo destacó la necesidad de establecer un diálogo constructivo entre el Gobierno Nacional y los gobernadores provinciales, enfatizando que es imperativo que se busquen medidas que compensen la reducción de recursos que afecta a las jurisdicciones subnacionales.

El gobernador hizo hincapié en que, a pesar de las diferencias políticas que puedan existir, los mandatarios provinciales están unidos en esta cuestión y han apoyado diversas iniciativas del gobierno nacional, incluso cuando estas provienen de administraciones de distinto signo político. Sin embargo, Jaldo subrayó que, ante la actual situación, se demanda una reciprocidad que permita a las provincias gestionar de manera más eficiente sus propias economías.

En cuanto a la situación particular de Tucumán, el gobernador reiteró el compromiso de la provincia de cumplir con los acuerdos salariales y paritarios establecidos, asegurando que se respetarán los compromisos firmados con los trabajadores. Esta afirmación busca generar confianza en la población y en los empleados públicos, en un momento en el que la estabilidad económica es un tema de preocupación generalizada.

Así, la intervención de Jaldo no solo se centra en la crítica a las decisiones del gobierno nacional, sino que también plantea un llamado a la colaboración y la búsqueda de soluciones conjuntas, reflejando una postura que, si bien reconoce la adversidad, también abre la puerta a la esperanza de un diálogo que beneficie a todas las partes involucradas.