En medio de un clima enrarecido, River Plate salió al cruce de un polémico episodio que sacudió el ámbito partidario. El presidente del club, Jorge Brito, repudió públicamente los dichos lanzados en el programa de radio Sintonía Monumental, en los que se agredió verbalmente a Marcelo Gallardo, entrenador histórico de la institución.
“No vamos a permitir más ataques personales, cobardes, ni mentiras disfrazadas de información”, expresó Brito en su cuenta personal de X (ex-Twitter), en un mensaje que generó inmediato respaldo de los hinchas en redes sociales. Minutos después, el club oficializó su postura con un comunicado institucional y sanciones contundentes.
El conflicto se originó en una emisión del programa conducido por Hernán Santarsiero, donde el tuitero José Ramón González (@ElFeoyelBeto), quien oculta su rostro con una máscara de gallo, lanzó comentarios ofensivos sobre la vida privada del Muñeco. Las expresiones, que incluyeron incluso una instigación al suicidio, generaron una fuerte ola de rechazo en el entorno riverplatense.
En su comunicado, River anunció que le quitó la acreditación de prensa al medio Sintonía Monumental, dejándolo fuera del listado de medios partidarios. Asimismo, se suspendió la condición de socios de Santarsiero y González, quienes tendrán la oportunidad de realizar un descargo ante la Comisión Directiva. El club también solicitó al Departamento de Legales que evalúe posibles acciones jurídicas “en resguardo de la integridad institucional”.
“Repudio absoluto a los comentarios extrafutbolísticos de Hernán Santarsiero y José Ramón González. En reiteradas ocasiones se han dedicado a difamar, denigrar e inventar sobre nuestro club, jugadores, cuerpo técnico y sus familiares. Esta no fue la primera vez, pero no vamos a permitir más ataques personales”, remarcó Brito.
Antes de que se conocieran las medidas, González publicó un hilo en X en el que pidió disculpas, aunque de forma controvertida, justificando su accionar con expresiones habituales de su generación: “Era común decir entre amigos ‘matate’, ‘tirate debajo de un tren’, ‘pegate un tiro’ para expresar enojo”, escribió.
El club dejó en claro que no tolerará conductas agresivas ni difamatorias contra sus integrantes y reafirmó su compromiso con el respeto institucional. La defensa de Gallardo, figura emblemática de la historia reciente del club, volvió a unir a la dirigencia y la hinchada en un gesto de respaldo unánime.