Dentro del local había cientos de personas, en su mayoría jóvenes, quienes pagaron una entrada y no se les pedía el pase sanitario. Los efectivos policiales pudieron determinar que el comercio no contaba con los permisos pertinentes.
“En el lugar había cientos de personas, en su mayoría jóvenes, a quienes se le cobraba entrada para el ingreso y además no se solicitaba el pase sanitario establecido por decreto en la provincia. Se habló con el propietario del local bailable y solicitó los permisos necesarios correspondientes, en especial la de Secretaria General de Policía, a lo que el hombre contestó no tener los papeles. Se labraron actuaciones por evasión de impuestos y se inició actuaciones judiciales por no cumplir el protocolo COVID-19”, señalaron fuentes consultadas.
Las tareas fueron supervisadas por el jefe de Unidad Regional Sur, comisario Julio Gutiérrez, Segundo jefe Rubén Albornoz y el jefe de Zona Uno, Guido Juárez.