Con la llegada del frío o en jornadas con alta humedad, los cristales del auto suelen empañarse, una situación tan común como molesta que puede dificultar notablemente la conducción. Aunque la mayoría recurre al aire acondicionado para resolverlo, existen trucos caseros igual de efectivos que no solo te pueden sacar del apuro, sino que también te ayudarán a prevenir el problema.

¿Por qué se empañan los vidrios?

El empañamiento de los vidrios es un fenómeno de condensación. Ocurre cuando el vapor de agua que hay en el aire del interior del auto entra en contacto con los vidrios fríos. Esa humedad se adhiere a la superficie y forma una capa borrosa que reduce la visibilidad.

Esto suele suceder cuando el interior del vehículo está más cálido que el exterior, y es aún más común en días de bajas temperaturas, lluvia o nieve.

Métodos para desempañar los cristales

1. Abrí las ventanillas unos minutos
Permitir que el aire circule es clave para equilibrar la temperatura del interior con la del exterior. Abrí ligeramente las ventanas para que el aire húmedo salga y así se reduzca la condensación.

2. Usá una solución casera de vinagre y agua
Mezclá partes iguales de vinagre blanco y agua en un rociador. Aplicalo sobre el parabrisas (o cualquier vidrio) antes de arrancar y pasá un paño seco. El vinagre actúa como repelente de humedad.

3. Colocá bolsitas de gel de sílice en el auto
Son las mismas que vienen en cajas de zapatos o productos electrónicos. Estas bolsitas absorben la humedad del ambiente, por lo que si las ubicás en el tablero, debajo de los asientos o en los compartimientos de las puertas, ayudarán a mantener el interior seco.

Cómo prevenir que los vidrios se empañen

Evitá dejar objetos húmedos dentro del vehículo, como paraguas, camperas mojadas o trapos.
Revisá los burletes y sellos de las puertas y ventanas para evitar filtraciones.
Mantené el interior limpio y seco: cuanto menos humedad y suciedad haya, menor será la probabilidad de empañamiento.
Controlá los filtros del aire acondicionado, ya que si están sucios o vencidos, no permitirán una buena circulación del aire.
Estas recomendaciones, además de mejorar la visibilidad y la seguridad al volante, ayudan a conservar mejor el interior del auto, evitar olores desagradables y prevenir manchas de humedad en los tapizados.