A raíz de diversos hechos de seguridad que sufren diariamente los taxistas, donde les sustraen celulares, recaudación del día y taxímetros, la Policía de Tucumán inició un proceso de investigación que llevó a una serie de allanamientos simultáneos en San Miguel de Tucumán y Banda del Río Salí.

“Necesitábamos saber a dónde iban los taxímetros robados y se determinó que tenían destino en tres domicilios de Capital y dos en Banda del Río Salí. Encontramos una gran cantidad de relojes de taxis de dudosa procedencia y de una marca particular”, precisó el comisario Ricardo Fresneda, Jefe de la Unidad Regional Capital, a las afueras del allanamiento realizado en 25 de mayo al 2400.

Por el momento no hay aprehendidos por la causa y los pedidos de detención se realizarán en base a los resultados arrojados por los procedimientos. El allanamiento realizado en 25 de mayo al 2400 dio un resultado altamente positivo al producirse el secuestro de alrededor de 40 taxímetros que iban a ser vendidos en un futuro en el mercado negro, según estipula la Policía.

“Taxistas de distintos municipios del Gran San Miguel de Tucumán son asaltados y les sustraen dinero, elementos personales y los taxímetros”, detalló el Comisario Principal Alfredo Díaz de la seccional primera.

María, representante del taller allanado, se refirió el procedimiento policial y aseguró que se trata de una “jugada sucia” de la competencia: “Este allanamiento surge por un audio de la competencia, viralizado hace un mes, hablando mal de este local y de otros locales perjudicándonos a nosotros. El que denuncia ya tuvo problemas con la justicia y sufrió allanamientos. Nosotros tenemos todos las habilitaciones requeridas y de lo que se están llevando nada es de dudosa procedencia”.

“Lo que encontraron son relojes nuevos que tienen procedencia Buenos Aires y taxímetros que dejaron los clientes para reparar, los cuales tienen datos y números de teléfono de todos los clientes. “Vamos a denunciar en la Justicia con todas las pruebas a esa persona que está ensuciando a otros técnicos para poder trabajar más”, apuntó la representante del local.

“Desde el 2006 que vendemos taxímetros nuevos y reparamos relojes usados, acá siempre hubo legalidad y nos sorprende todo esto”, concluyo Pablo, otro trabajador en representación del taller.