El estrés es una respuesta natural del cuerpo a un desafío o exigencia que puede ser física o mental. Si bien en pequeñas dosis puede ser útil, como cuando nos ayuda a evitar un peligro, su presencia crónica puede afectar nuestra salud física y mental.
Muchas veces buscamos diferentes técnicas que nos permitan controlar o bajar el estrés y existen varias, pero el seudocientífico estadounidense Andrew Huberman, que además es profesor de la Universidad de Stanford, revela que hay una que es infalible.
El especialista explicó qué es lo que hay que hacer: “Una doble inhalación seguida de una exhalación larga pueden bajar el nivel de estrés muy, muy rápido”, expresó Huberman, quien dijo que este es el patrón de respiración natural y añadió: “Todos lo hacemos de forma automática durante el sueño profundo cuando el dióxido de carbono en sangre es demasiado alto”.
Cuándo se puede aplicar este método
El científico dijo que el método se puede aplicar en cualquier situación o lugar y señaló que se trata de inhalar y justo al final colar un poco más de aire, como un pequeño segundo suspiro, mientras que después, se suelta todo el aire en una larga exhalación.
El experto recomienda inhalar con la nariz y dijo que la clave está también en la velocidad. “Inhalar acelera el corazón; exhalar lo ralentiza. Por eso, si alargamos la exhalación, estamos calmando nuestro sistema nervioso”, indicó Huberman.
Además, según su experiencia, es muy efectivo y hacen falta pocas series para lograr el objetivo. El experto manifestó que uno, dos o tres suspiros fisiológicos son suficientes para notar una disminución significativa del estrés.