El curioso hecho sucedió en enero en un domicilio ubicado en calle Balcarce al 2000. La Unidad de Robos y Hurtos II del Ministerio Fiscal solicitó que la pena sea de cumplimiento efectivo por el término de dos meses.
En la denuncia consta que “ingresó a las 05:00 horas en un horario donde aprovechó que la víctima se encontraba durmiendo, cuando la perrita fue la que comenzó a ladrar cuando lo vio en el fondo del patio. Para llevarse la pileta tuvo que vaciarla por lo que sacó los caños y los rompió”, fue la descripción que hizo la fiscal, Susana Cordisco, a cargo de la Unidad Especializada de Robos y Hurtos II del Ministerio Fiscal durante la audiencia.