El candidato Rodrigo Paz dió la sorpresa electoral en Bolivia. Al 91,4% del conteo rápido oficial, el postulante por el Partido Demócrata Cristiano (PDC), que no figuraba entre los favoritos, va ganando la primera vuelta del domingo, con el 32% de los votos, seguido por el ex presidente Jorge “Tuto” Quiroga, de Libre, quien obtiene más del 26,9%. De continuar esta tendencia, ambos candidatos se medirán el próximo 19 de octubre en el primer balotaje presidencial del país.
El tercer lugar lo ocupa el empresario Samuel Doria Medina (19,9%), quien se perfilaba como favorito en las encuestas, y le sigue Andrónico Rodríguez (8%), el candidato más aventajado de la izquierda. En tanto, el oficialista Eduardo Del Castillo ocupa el sexto lugar, con apenas el 3,1% de los votos, confirmando lo que se preveía: una muy mala noche para el Movimiento al Socialismo (MAS), que de esa manera pierde el poder después de dos décadas.
Los datos pertenecen al Sistema de Resultados Preliminares (Sirepre) del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que no son vinculantes ni definitivos porque se basan en fotografías de actas transmitidas digitalmente. “Su único propósito es informar a la ciudadanía, a las organizaciones políticas y a los medios de comunicación. En ningún caso sustituirán al cómputo oficial”, explicó el vocal electoral Gustavo Ávila.
Para ganar en primera vuelta, un candidato debía lograr más del 50 % de los votos, o un mínimo del 40 % con al menos diez puntos de ventaja sobre el siguiente, según la Ley del Régimen Electoral.
Este resultado también marca un cambio histórico en el país porque por primera vez en 20 años se eligió al candidato de un frente distinto al Movimiento Al Socialismo, con lo que se rompe la hegemonía de la izquierda en el país andino.
En medio de la disputa de la izquierda, el ex presidente Evo Morales (2006-2019) inició una inédita campaña para pedir a sus militantes la anulación del voto como un acto de rechazo a su inhabilitación electoral.
La jornada electoral se desarrolló con normalidad pese a algunos incidentes aislados, como una detonación en el recinto electoral de la localidad de Entre Ríos, en Cochabamba, donde votaba el candidato de Alianza Popular, Andrónico Rodríguez, quien luego fue físicamente agredido por personas que estaban en el centro de votación.
El fiscal que investiga la denotación, Juan Carlos Campero, reportó a los medios locales que no hubo daños materiales ni personales y añadió que la votación se realizó con normalidad.
Varias organizaciones internacionales enviaron misiones de observación electoral, entre ellas la Unión Europea y la Organización de Estados Americanos, que se sumaron a instituciones bolivianas e iniciativas ciudadanas como Cuidemos el voto 2025. “Es la elección más observada en la historia de Bolivia”, manifestó el vocal electoral Gustavo Ávila.
Paz es hijo del ex presidente Jaime Paz Zamora (1989-1993) y aunque muchos lo consideran un outsider, está en política desde el año 2002 cuando fue electo diputado. Tras haber ocupado funciones públicas en la ciudad de Tarija, al sur del país, actualmente es senador de oposición. En tanto, Quiroga fue presidente del país entre 2001 y 2002, tras la renuncia de Hugo Banzer, de quien fue vicepresidente.