El grupo militante islamista Al Shabaab, que, según los analistas, está dispuesto a aprovechar el estancamiento, reivindicó la autoría del atentado.

Entre los muertos se encuentra Abdirashid Abdunur, jefe de la Agencia Nacional de Inteligencia y Seguridad en Dhusamareb, según ha declarado el oficial de policía Mohamed Ahmed. En total, 12 personas de la agencia murieron en el ataque cerca de la ciudad, dijo la policía.

El acuerdo para elegir un nuevo presidente el lunes ha sido evasivo hasta ahora, lo que amenaza con desatar más agitación política.

En un principio, Somalia pretendía celebrar sus primeras elecciones directas en más de tres décadas, pero los retrasos en los preparativos y la incapacidad del gobierno para frenar los ataques diarios de los insurgentes de Al Shabaab, vinculada a Al Qaeda, hicieron que se pasara a una votación indirecta, en la que los ancianos elegirían a los legisladores que escogerían al presidente.

Sin embargo, las autoridades regionales de al menos dos de los cinco estados federales de Somalia, Puntlandia y Jubbalandia, se oponen por ahora a la celebración de las elecciones.